RECORD EN EUROPA

Hasta ahora, 'Titulcia' vivía en un centro de rescate de animales. Foto: Faunia

Su nombre, 'Titulcia', hace honor a la localidad madrileña en la que nació. Se trata de la mayor serpiente pitón de Europa y uno de los siete ejemplares más grandes del mundo. Mide siete metros, pesa 100 kilos y tiene una espectacular boca con casi cien dientes.

El centro de rescate de animales exóticos de la Comunidad de Madrid en el que hasta ahora vivía cierra sus puertas por falta de financiación por lo que ha sido trasladada al parque temático de la naturaleza Faunia.

La pitón reticulada, aunque no es venenosa, mata a sus víctimas por constricción. Se alimenta de aves y pequeños y medianos mamíferos, como roedores, ciervos, monos e incluso leopardos. Los ejemplares más grandes de esta especie, como la madrileña 'Titulcia', pueden llegar a devorar a un ser humano, como ha ocurrido en algunos países que conforman su hábitat natural: las selvas húmedas de de Asia sudoriental, Indonesia y Filipinas. Algunos ejemplares miden más 10 metros y llegan a pesar 120 kg de peso.

Nocturna y ágil
Un cuidador con la muda de la serpiente.
Este reptil puede recorrer largas distancias en el agua. Es un animal nocturno y se caracteriza por atacar a sus víctimas de forma muy ágil y rápida. Según Faunia, un ejemplar como 'Titulcia', es capaz de lanzar su ataque a una víctima a 2 metros de distancia en cuestión de décimas de segundo. Su largo cuerpo es puro músculo y es prácticamente imposible sobrevivir a la constricción que aplica a sus víctimas.



Estos reptiles mudan su piel cada año. La imagen de la izquierda muestra los siete metros de su piel de la enorme serpiente.

En el parque temático madrileño viven también otros animales procedentes de Exotarium, que fueron abandonados y recogidos por este centro de rescate animal. Entre los compañeros de 'Titulcia' hay una anaconda verde (Eunectes murinus), un caimán de anteojos (Caiman cocodrilus), tortugas carnívoras de caparazón blando (Trionix spp.), tortugas de patas rojas (Geochelone carbonaria), tarántulas chilenas (Grammostela spp.) y serpientes falsa coral negra (Lampropeltis getulus nigritus)
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